PASÓ TODO LO QUE NO TENÍA QUE PASAR

Si hay una cita importante marcada en rojo en el calendario, por parte del aficionado a los roscaderos, esa fecha es el 11 de octubre. Este año comenzamos mal, ya que hubo cambio de fecha al 10 de octubre, primer punto en contra. ¿Por qué mover algo que está asentado durante años y funciona? Los que mandan sabrán el motivo.

Cuando se presentó el cartel allá por el mes de agosto todos los aficionados sabíamos que no iba a ser un concurso cualquiera. Al rechazar acudir a Zaragoza la ganadería de los Hermanos Marcén, la empresa tuvo que buscar alternativas y fue difícil y costoso.

La sorpresa fue mayúscula al anunciar a las 4 ganaderías participantes, apenas han realizado concursos de roscaderos en los últimos años o directamente no habían participado nunca. El único que iba a llegar al día 10 de octubre con algún concurso hecho era Rafael Alarcón, y teniendo en cuenta que solo llevó 4 vacas al festejo en el que participó con el resultado que todos vimos… pues se temía lo peor.

El run run y los nervios por la llegada del concurso era patente en los días previos y en el mismo patio de cuadrillas. Horas antes del concurso se cambiaron vacas de las anunciadas. La vaca que casi todos querían, por no decir todos, la famosa nº208 “Bonita” no iba a participar en el concurso de roscaderos por llevar coja durante meses. El ganadero decidió, hasta el último momento, confiar en que iba a poder participar, aunque muchos sabían que no iba a ser posible. A posteriori hemos sabido que ha tenido que ser sacrificada, una verdadera pena que ya no podamos ver a esta vaca en ningún festejo, otra más de la estrella que se va, y van unas cuantas.

Después de todo esto y de un rápido desencajonamiento de los toros de Sánchez Herrero, comenzó la presentación y el concurso de roscaderos más importante de la temporada para participantes y aficionados, con una plaza a reventar y con ganas de ver lo que sucede en la arena.

La cuadrilla de Sádaba fue la primera en participar con la vaca “Santa” de la ganadería El Ancla y con el hierro de Domínguez. En los primeros golpes la vaca no se empleó y se paró pronto entre los círculos y las tablas. Cuando comenzaron los pitos al no arrancarse al roscadero, la vaca cambió del chip y entró con mucha fuerza al roscadero, tirando a los componentes al suelo. El pechuga consiguió aguantar la embestida, con el culo al suelo, pero no soltó el cesto. Una vez más pegó con esa fuerza la vaca desplazando a la cuadrilla por el círculo interior. La vaca volvió a pararse y solo consiguieron hacer 5 entradas válidas. La cuadrilla fue ovacionada por su actuación y se escucharon división de opiniones (pitos y aplausos) para la vaca.

Una de las cuadrillas más jóvenes de la noche hizo segunda, Luna. Se enfrentaron a “Temblores” de Iván López. Una vaca con mucho volumen pero que se entregó poco en el roscadero. La vaca pegaba en el cesto y salía suelta hacia tablas, la citaban y volvía a repetir lo mismo. En unas de las veces en las que el citador de la cuadrilla Ismael Román sacó a la vaca de los círculos, cayó al suelo con la suerte de que la vaca no hizo por él. Aún con el hombro sacado, con gestos de dolor y molestia, el de Pradilla acabó la actuación junto con su cuadrilla. Consiguieron 14 entradas que a la postre les valdría para ganar el concurso, el cual se iba poniendo complicado para las cuadrillas que salieran detrás.

Ebro-Jalón y "Manzanerita" de Hermanos Oliva hicieron terceros de la noche. Una vaca con gran encornadura que puso las cosas complicadas a la cuadrilla al no caberle la cabeza en la campana del roscadero. Fue difícil sacarla de los círculos porque Manzanerita se enceló con el cesto y no quería separarse de él. Con mucha habilidad “Cheli” lo consiguió y así pudieron sacarle 9 entradas a una vaca que en los últimos golpes apenas se empleó.

La actual campeona del concurso, la cuadrilla de Utebo-Monzalbarba se vieron las caras con “Culebrilla” de Rafael Alarcón. Una preciosa vaca castaña con muchos kilos y con una gran presentación. En el primer golpe, la vaca metió riñones y empujó con todo, lo que hizo que derribara a la cuadrilla, pero no soltaran el cesto. Una vez rearmados, y desde tablas, la vaca se arrancó de nuevo pegando con la cara arriba y derribando a la cuadrilla, haciendo que todos los componentes soltaran el roscadero por lo que quedaron eliminados.

Los Furtivos se enfrentaron con “Alemana” de la ganadería El Ancla. La vaca salió suelta y sin ver el roscadero, una vez centrada se arrancó a pegar y se marchó. La res entraba y salía sola sin hacer falta el trabajo del citador, aguantando bien los roscaderistas. Se escucharon pitos desde la grada hacia la vaca cuando fue recogida a corrales. Lograron empatar el concurso con un total de 14 entradas válidas.

La joven cuadrilla de Utebo midió sus fuerzas con “Vendimiadora” de Iván López. Una bonita vaca colorada que no se empleó en el cesto pero que tuvo movilidad y repetía. En más de una ocasión, le costó arrancarse tras el citador. Un total de 10 entradas consiguió hacer esta cuadrilla.

La sustituta de la famosa 208 fue la nº233 “Triana” de Hermanos Oliva, una vaca que en otras ocasiones se ha llamado “Matabichos”. Pocos querían esta res ya que sabían lo que hace en este tipo de concursos y en sus salidas, destaca por su buen trabajo en la capea y sus remates en tablas. Enfrente tuvo a la cuadrilla de Frente Colono que solo pudieron realizar una entrada ya que la vaca se partió un pitón en su única vez que entró al roscadero. Con buen criterio se retiraron del albero para que la vaca no sufriera más daños.

En el octavo lugar ocurrió lo que no debe pasar nunca en un concurso de roscaderos y menos en Zaragoza. A la cuadrilla de Pina de Ebro le correspondió en el sorteo la vaca marcada a fuego con el nº577 de nombre “Religiosa” de Rafael Alarcón. Pero en su lugar, salió por toriles la que estaba sorteada para el último lugar “Trucha”. Un error en los chiqueros hizo que saltara a la arena la vaca que no correspondía. La cuadrilla recibió un primer impacto muy fuerte y el segundo aún fue más, derribándolos y quitándoles el roscadero. Antes de este segundo golpe, y tras los gritos y la sorpresa de los allí presentes, se comunicó por megafonía el error cometido. Una sonora pitada se adueño de la Misericordia, y con razón. Esto no puede suceder en el concurso más importante del año. La decisión sobre que hacer entonces se demoró unos minutos, por lo que decidieron continuar con el concurso y que actuara la siguiente cuadrilla.

Hicieron novenos de la noche la cuadrilla de roscaderos de Virgen de la Oliva y “Asesina” de El Ancla. En esta actuación ocurrió lo que nadie quería que pasara. La vaca de salida tardó en ver el roscadero, cuando lo vio fue hacia él pegando, pero saliendo rápido. En la siguiente entrada pegó fuerte y desplazó a los roscaderistas por el círculo. Las siguientes veces que fue al cesto la vaca apenas se empleó en él. En la sexta entrada la vaca se dejó la vida en el albero de la Misericordia, dejando al público helado y con el disgusto que ello conlleva para el ganadero.

Llevábamos tres actuaciones seguidas en las que por unas cosas u otras sucedieron cosas que nadie espera. La organización y las cuadrillas decidieron que la cuadrilla de Pina de Ebro volviera a actuar con la vaca que les había tocado en el sorteo y que “Trucha” saliera en último lugar tal y como correspondía.

Así pues, Pina de Ebro volvió al ruedo para medirse, ahora sí, a “Religiosa” de Rafael Alarcón. La vaca es una auténtica pintura, berrenda en negro, con un lucero en la frente y gorda a más no poder. Sin duda la mejor presentada del concurso. La vaca cuando pegaba lo hacía fuerte pero siempre echando la cara arriba, lo que hizo poner en apuros a los roscaderistas en más de una ocasión.  Consiguieron hacer 10 entradas válidas.

En décimo lugar actuó Montañana y “Guitarrista” de Iván López, la más joven del concurso y con menos presencia. La vaca fue repetidora en el cesto, pero sin emplearse, entraba y salía sin pena ni gloria. El recortador la entendió a la perfección y realizó muy bien su trabajo consiguiendo 12 entradas.

La cuadrilla de Villamayor de Gállego se midió a “Tigra” de Hermanos Oliva Escudero, una de las habituales cuando el hierro de la estrella hacía concursos de roscaderos. La vaca tiene una gran presencia con una importante encornadura por delante. Pegó fuerte el primer golpe, pero salió rápido de él volviéndose al cesto de nuevo. El citador estuvo hábil sacándola y llevándosela hasta tablas con mucho peligro. La vaca entró de nuevo varias veces al roscadero pegando fuerte, pero sin meter riñones y sin emplearse. Donde sí que daba sensación de peligro era cuando iba detrás del citador que se arrancaba con todo. 8 entradas consiguieron sacarle a la vaca.

El sorteo quiso que la cuadrilla que lidera la Liga del Mimbre fuera la última en participar de la noche. La cuadrilla de Gallur se vio las caras con “Trucha” de Rafael Alarcón, una vaca que salía por segunda vez al ruedo después del fallo cometido en los corrales anteriormente. La vaca salió con más fuerza que la primera vez y pegó con todo en el roscadero derribándolos y haciendo que todos sus componentes excepto el pechuga se soltaran de él. Entonces el citador, Saul Pardo, hizo su función: sacó a la vaca del círculo para que sus compañeros se recompusieran y comenzó un autentico recital del de Paniza. En apenas un metro metía y sacaba a la vaca del roscadero, esto lo hizo varias veces lo que provocó que la vaca pronto se viniera abajo. Consiguieron sacarle más entradas a la vaca no sin que costara porque el animal se reservó después de se desgastara tanto en el cesto como con el citador. Al final consiguieron 11 entradas válidas y la ovación del todo el público. Quien también recibió una gran ovación al pasar a corrales fue “Trucha”, sin duda la mejor vaca del concurso.

Una vez actuado las doce cuadrillas se pasó a la entrega de trofeos, no sin antes hacer salir a saludar al que fue el mejor ganadero de la noche Rafael Alarcón de Pastriz, emocionado salió al tercio a recibir el aplauso de toda la plaza. El tercer premio fue a parar para la cuadrilla de Gallur. La cuadrilla que quedó clasificada en segundo lugar fue la cuadrilla de Montañana. Y en primer lugar, empatados con 14 entradas, los campeones fueron las cuadrillas de Luna y de Los Furtivos en su última actuación.

Como bien dice el titular, fue una noche en la que pasó todo lo que no tiene que pasar en Zaragoza. Una noche para contar al que no ha estado y no creérselo. Un experimento con 4 ganaderos que no salió bien; con un triunfador claro que semanas antes había vivido la otra cara y con dos cuadrillas campeonas.

Lo que está claro es que solo hay una ganadería hoy en día capaz de hacer un concurso de roscaderos igualado al nivel de Zaragoza. Pero, hay que dar oportunidades durante toda la temporada al resto de ganaderías que quieran participar y así tener múltiples opciones para elegir a las mejores vacas para el concurso de roscaderos de Zaragoza.

No está claro que rumbó van a tomar los festejos populares a partir del año que viene debido a la licitación de la plaza, lo que sí que ha quedado claro es que el concurso se debe de hacer con las mejores cuadrillas y las mejores vacas. No se deben cambiar vacas anunciadas si se sabe desde hace días que no pueden participar y hay que darle más promoción e importancia a todos aquellos que se ponen delante de las vacas para pararlas con un cesto.