El Director de Lidia en los Festejos Populares en Aragón
- A.S.A.
- 20 oct
- 4 Min. de lectura

En este artículo vamos a explicar con más detalle las funciones del director de lidia en los festejos populares taurinos de nuestra comunidad autónoma de Aragón.
De acuerdo con la legislación vigente, el director de lidia es una figura clave para garantizar tanto la seguridad como el correcto desarrollo del evento taurino. Debe ser un profesional inscrito en las Secciones I o II del Registro General de Profesionales Taurinos, o un banderillero de primera categoría de la Sección V.
Funciones durante el festejo
Una vez comenzado el espectáculo, sus principales funciones son:
a) Dirigir el correcto desarrollo del festejo.
b) Prevenir accidentes, limitar sus consecuencias y colaborar con los servicios de asistencia sanitaria, además de instruir a los colaboradores voluntarios sobre sus tareas.
c) Controlar el trato adecuado a las reses y, si fuera necesario, proponer al Presidente la suspensión del evento.
d) Colaborar con el personal de organización y de orden en el ejercicio de sus funciones.
La presencia del director de lidia responde a la necesidad de contar con una persona cualificada y con experiencia en el manejo del ganado bravo, que asuma la máxima responsabilidad técnica durante todo el festejo.
La realidad en el día a día
Más allá de la normativa, conviene analizar lo que ocurre en la práctica. No todos los directores de lidia están preparados física o mentalmente para afrontar situaciones de peligro que requieren una actuación rápida y decisiva, en ocasiones para salvar vidas. Cada semana conocemos casos en los que, gracias a su intervención, se han evitado percances graves.
Sin embargo, también existen situaciones en las que los directores de lidia llegan tarde, actúan de manera deficiente o directamente no intervienen ante cogidas. Las causas pueden ir desde la falta de preparación hasta la falta de aptitud o profesionalidad. Gracias a las redes sociales, estos casos se hacen cada vez más visibles, lo que ha llevado a que algunos municipios prescindan de quienes no ofrecen garantías.
Por otro lado, también se difunden los ejemplos positivos: actuaciones rápidas, quites oportunos y ayudas eficaces que han evitado tragedias y que convierten a determinados directores de lidia en los más demandados del sector.
No daremos nombres de nadie en particular porque todos los aficionados a los festejos populares somos conocedores de quienes realizan bien su trabajo y quienes no, basta con ver las redes sociales o las retransmisiones de las vaquillas de Huesca o Zaragoza a través de Aragón TV.
En la provincia de Zaragoza existen muchos directores de lidia, aunque solo unos pocos destacan realmente por su competencia. Algo similar ocurre en Teruel, donde trabajan grandes profesionales que, sin embargo, son menos conocidos fuera de su entorno.
En este contexto, quizá algunos directores de lidia deberían replantearse su continuidad en los festejos, ya que lejos de aportar seguridad pueden, en ocasiones, aumentar el riesgo para los participantes.
Mención especial merece la labor de estos profesionales en concursos de recortadores, de roscaderos o de cortes, donde la atención debe ser máxima. En estas modalidades uno o varios participantes se encuentran solos en el ruedo frente a la res, lo que incrementa el nivel de riesgo. En estos casos, un quite en el momento preciso, una intervención rápida o una colocación adecuada del director de lidia pueden marcar la diferencia y evitar consecuencias mucho más graves.
Una función importante y muy olvidada es que los directores de lidia tienen que velar por un trato adecuado a las reses que participante en los festejos. De todos es sabido que en muchas localidades no se trata de forma correcta a los animales, cogiéndolos cuando no es necesario, dándoles vueltas agarrados del rabo sin motivo, tirándolos continuamente al suelo tras los recortes y un largo etcétera. Los directores de lidia, ayuntamientos, comisiones, voluntarias taurinos, presidentes de los festejos y Policía Adscrita no deberían de mirar para otro lado y evitar, reprochar e incluso sancionar estas actitudes que tan en contra están de nuestra cultura y tradición.
Retos y propuestas de mejora
El papel del director de lidia es imprescindible en los festejos taurinos populares, pero también plantea retos que deben abordarse para reforzar la seguridad y la profesionalidad. Entre ellos:
Formación continua de los profesionales, tanto física como mental. Además de preparación para actuar ante situaciones de riesgo y el manejo del ganado.
Evaluación periódica de las actuaciones e intervenciones de los directores de lidia por parte de las comisiones organizadoras, de los propios ayuntamientos y de la Diputación General de Aragón con el fin de detectar carencias y reconocer a los profesionales más cualificados.
Mayor visibilidad: ya que en muchas ocasiones se desconoce quién es el director de lidia e incluso que funciones tiene que desempeñar.
El futuro de los festejos populares pasa por seguir contando con directores de lidia bien preparados, reconocidos y valorados, capaces de responder con rapidez y responsabilidad en momentos críticos. Solo así se podrá garantizar que la tradición taurina aragonesa se desarrolle con la máxima seguridad y respeto tanto para los participantes como para los animales.




Comentarios